Nuestro organismo consta de un 70 / 75 % de agua y todos los días realiza una infinidad de procesos en los que la pierde como el sudor, la respiración, la orina y las defecaciones, por lo que es indispensable reponerla.
Beber suficiente agua nos mantiene hidratados y permite que las toxinas y residuos que nuestro cuerpo produce se eliminen. Una gran ventaja que tiene el agua natural es que no aporta ninguna caloría ni se transforma en grasa, por lo tanto ayuda a tener una buena figura.
El agua es muy importante para prevenir la deshidratación, ayuda a que tengamos un buen tránsito intestinal y a sentirnos menos hinchados. Cuando nos deshidratamos el metabolismo se hace más lento, es por esta razón que beber suficiente agua es muy importante para poder reducir de peso.
Cuando no consumimos una cantidad suficiente de agua podemos sentir: dolor de cabeza, fatiga, calambres, cambios de humor o dolores musculares.
Otras veces pensamos que tenemos hambre y en realidad lo que tenemos es sed. Intenta beber un vaso de agua en el momento que sientas o pienses que tienes hambre y probablemente esa sensación desaparezca. Vivimos tan ensimismados en nuestras actividades que nos hemos olvidado de escuchar a nuestro cuerpo e identificar las señales que nos manda. ¡Obsérvate y prueba esta sugerencia!
Es necesario beber agua durante el día porque la sensación de sed sucede cuando el cuerpo ya tiene un nivel bajo de hidratación, por lo que si tomas agua constantemente puedes evitar llegar a sentirla. ¿Cuál es la cantidad ideal? Todos somos diferentes y depende de cada uno de nosotros; sin embargo, un promedio es entre 1.5 y 2 litros de agua al día.
Una forma fácil de saber si tienes un buen nivel de hidratación es por medio del color de la orina: si es claro estás consumiendo suficiente agua y si es oscuro y concentrado la cantidad de agua que consumes es poca.
Beber agua natural tiene muchas ventajas, por lo pronto considera las descritas anteriormente y haz el propósito de tomarla todos los días. Si el sabor no te gusta prueba agregando un poco de limón o rebanadas de pepino, fresas o algunas hojas de menta o hierbabuena para darle un toque diferente. Verás que además de obtener beneficios, disfrutarás su delicioso sabor.
¿Y si no me gusta beber solo agua?
Parte del agua que requiere el cuerpo se obtiene a través de alimentos con un alto contenido de agua, como sopas, tomates, naranjas, pero la mayoría proviene del agua potable y otras bebidas.
Durante el funcionamiento diario, el cuerpo pierde agua y es necesario reponerla. Notamos que perdemos agua a través de actividades como sudar y orinar, pero el agua se pierde incluso al respirar.
Beber agua es la mejor fuente de líquido para el cuerpo. La leche y los jugos también son buenas fuentes de líquido, pero las bebidas que contienen alcohol y cafeína, como los refrescos, el café y la cerveza, no son ideales porque a menudo contienen calorías vacías.
Anteriormente, se pensaba que las bebidas con cafeína tenían propiedades diuréticas, lo que significa que hacen que el cuerpo libere agua. Sin embargo, estudios muestran que la pérdida de líquidos a causa de las bebidas con cafeína es mínima.
La cantidad de agua necesaria cada día varía de persona a persona, dependiendo de qué tan activo seas, cuánto sudes, etc.
No existe una cantidad fija de agua que se deba consumir diariamente, pero existe un acuerdo general sobre lo que es una ingesta saludable de líquidos.
De acuerdo con las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina de Estados Unidos, la ingesta diaria promedio recomendada de agua tanto de alimentos como de bebidas es: para hombres: alrededor de 3,7 litros y para mujeres: alrededor de 2,7 litros.