Comiendo estos alimentos puedes evitar el cáncer de colon
El cáncer colorrectal también se conoce como cáncer de colon o cáncer de recto. Los médicos comúnmente lo identifican según el lugar donde comienza el tumor. El cáncer colorrectal comienza cuando se desarrollan tumores o pólipos en el revestimiento del colon o en la parte final del intestino grueso que se llama recto.
Muchas investigaciones han demostrado que los hábitos relacionados con la dieta, el peso y el ejercicio están fuertemente relacionados con el riesgo de cáncer colorrectal. Cambiar algunos de estos hábitos de estilo de vida puede ser difícil, pero hacerlos puede reducir el riesgo de muchos otros tipos de cáncer, así como otras enfermedades graves, como enfermedades cardíacas y diabetes.
Factores de riesgo
Algunos factores de riesgo para el cáncer de colon incluyen los siguientes:
Antecedentes familiares o personales de cáncer colorrectal
Alto consumo de carne roja y/o procesada
Fumar a largo plazo
Uso a largo plazo de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos
Ingesta baja de calcio
Bajo consumo de frutas y verduras.
Bajo consumo de fibra integral
Consumo de alcohol moderado a fuerte
La inactividad física
Antecedentes personales de enfermedad inflamatoria intestinal crónica.
Obesidad
Diabetes tipo 2
Una buena dieta puede ayudarte a prevenirlo
Nuestro colon necesita la cantidad correcta de ácidos grasos omega 3, vitamina D, calcio y flavonoides para prevenir el crecimiento de tumores. La fibra también es esencial, ya que promueve el movimiento intestinal regular y ayuda a limitar la acumulación de bacterias.
Trata de incluir en tu dieta los siguientes alimentos para mantener sano tu colon
Pescados
El pescado fresco rico en ácidos grasos omega-3 puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo. Tus mejores opciones serían el salmón, el atún y las sardinas al horno o ahumados, ya que también son ricos en vitamina D y calcio.
Frutas
Las frutas son generalmente ricas en antioxidantes, fibra y fitoquímicos específicos que pueden ayudar a protegerte de los problemas digestivos.
Las manzanas, moras, plátanos, arándanos, naranjas, peras y frambuesas son algunas de las mejores fuentes de fibra.
Verduras sin almidón
Para la salud en general, la regla es llenar dos tercios de tu plato con alimentos de origen vegetal, ya que son ricos en fibra, vitaminas, minerales y fitoquímicos. Sin embargo, para reducir el riesgo de tener diabetes tipo 2, otro factor que puede provocar cáncer de colon, la Asociación Estadounidense de Diabetes sugiere que hagas hincapié en las verduras sin almidón.
Trate de comer al menos de 3 a 5 porciones de vegetales sin almidón al día, como lechuga, col, pepinos, alcachofas, brócoli, zanahorias, coliflor, apio y espinacas.
Carne blanca
La proteína es crucial para el desarrollo muscular, el crecimiento de los tejidos y más. Y dado que necesitas limitar tu consumo de carne roja, tus alternativas más saludables serían pollo o pavo sin piel. Los huevos también son una buena opción.
Cereales integrales
Los cereales integrales son otro grupo de alimentos ricos en fibra que puedes combinar perfectamente con pescado, huevos y carnes blancas. Tus opciones más saludables serían el arroz integral, la cebada, la avena y la quinoa.
Nueces
Comer al menos dos porciones de nueces a la semana puede ayudar a mantener bajos los niveles de insulina y azúcar en la sangre, lo que reduce el riesgo de tener diabetes tipo 2. Dado que también están repletos de ácidos grasos saludables, fibra y flavonoides, las nueces también pueden ayudar a disminuir las posibilidades de tener cáncer de colon.
Agrega también a tu dieta los frutos secos como las almendras, las avellanas, los pistaches y las nueces de macadamia.
Frijoles y legumbres
La soya, las lentejas, los chícharos, los frijoles negros y rojos son una excelente fuente de proteína, fibra, vitamina B y vitamina E. Además de los beneficios y la protección que brindan al colon, los frijoles y las legumbres también pueden ayudar reducir los niveles de colesterol y azúcar en la sangre.
Es importante cuidar la alimentación desde siempre, muchas enfermedades se pueden prevenir con una dieta equilibrada y correcta, siempre tomando en cuenta las necesidades particulares de cada persona.
Juntos podemos idear un plan alimenticio adecuado a tu presupuesto, gustos, limitaciones y tiempo.